«Hay una poesía trasnochada
y hay otra tartamuda y descriptiva.
Aquella es delirante hasta la estrella
y ésta es, mísero amor, la que se explica,
se rasga los vestidos, se disculpa. (…)
La belleza está aquí, de otra manera,
y no me gusta nada por sincera. (…)
Yo quisiera, y no puedo, volver al mundo exacto,
limpio de polvo y de paja, felizmente inhumano.»
La Puerca Poesía, Gabriel Celaya.