En mi cuaderno azul dibujé un árbol.

Cuando comencé a dibujar en lugar de hablar compulsivamente o simplemente de situarme en la reacción, entonces las preguntas vinieron solas, sin necesidad de invocarlas, de buscarlas. También algunas respuestas. Hace algunos meses, la útima vez que estuve en Madrid, compré un cuaderno. Compré varios, uno azul y uno negro. Durante el confinamiento empecé elSigue leyendo «En mi cuaderno azul dibujé un árbol.»

Clasificar lo escrito.

    «Entonces fue terrible, porque me enfrenté con la carga de crear el orden dentro del caos en que se había convertido mi vida».  «Empezaré un cuaderno nuevo, y toda yo estaré en un solo cuaderno».    El Cuaderno Dorado, Doris Lessing.   Escribo un diario. También escribo notas en el móvil y garabatosSigue leyendo «Clasificar lo escrito.»

Diario: hola, ando como sonámbula por Madrid y es extraño.

Ando como sonámbula por Madrid y es extraño. Calle Argumosa, Plaza de Lavapiés, Paseo de Santa María de la Cabeza, Calle Sombrerete, Paseo del Prado, Calle Echegaray, Plaza Mayor. Pisar y reandar mi ciudad es recorrer un mapa de constelaciones de memoria. Dibujo mi historia en los paseos. Ilustro mi cronología en sus calles, ySigue leyendo «Diario: hola, ando como sonámbula por Madrid y es extraño.»

El calor, José Hierro y los cuadernos de viajes.

«Transfigurado por la noche, oficio el rito de la transfiguración con libaciones de ginebra, bourbon, whisky, tequila, ron, humanizadas por el zumo de lima, ácida y verde, que habla mi misma lengua con acento más dulce.  Alguien me advierte que estoy solo». «Alrededor, gira la ciudad, irrepetible, giramos y giramos hasta morir, porque por finSigue leyendo «El calor, José Hierro y los cuadernos de viajes.»

Relaciones por correspondencia (El sur: tercera parte).

Hacía tanto tiempo que no me marchaba de vacaciones. Hoy compré otro billete de tren que encadenaré con más playa que a su vez encadenaré con Francia. Los días pasan despacio (¿o deprisa?) bajo el sol del sur. Leer 84, Charing Cross Road me está dando ganas de vivir a través de correspondencia y escribir cartas aSigue leyendo «Relaciones por correspondencia (El sur: tercera parte).»

Un cuaderno parisino.

«J’ai voulu    intense    t’asseoir sur mes genoux pour embrasser ton faible et tendre sourire avant que tu ne lèves tes poings redoutables au-dessus de ton sexe». «Intensamente he querido sentarte en mis rodillas para besar tu tierna y débil sonrisa antes de que levantes tus temibles puños sobre tu sexo». Paul Valet (laSigue leyendo «Un cuaderno parisino.»

Escena de un domingo.

«Todo es mío y nada me pertenece, nada pertenece a la memoria, todo es mío mientras lo contemplo.» Wislawa Szymborska. Reviso mis poemas. Reviso mis poemas, digo. Después me quedo vacía. Ayer, el lago y los amigos, y el coche, y una bajada de tensión y una noche de pasar miedo. Pasamos miedo y hablamosSigue leyendo «Escena de un domingo.»

La cotidianidad.

«Quiero decir que incluso el destino químico afecta a la poesía de manera violenta, un azar que aparece entre los volúmenes y las mascarillas. (…) Ya está bien de pamplinas. (…) La poesía está hecha de pulsaciones eléctricas y precedentes en desorden». Juan Carlos Mestre, La Bicicleta del Panadero. 10.00 a.m: Desayuno y ordeno misSigue leyendo «La cotidianidad.»