Sol de medianoche (o la crónica de un día cualquiera).

«Atención al sol que se alza de la oscuridad». Khalil Gibran, Lágrimas y sonrisas. 08.00 a.m. Encierros sanfermineros. Despertar. Desayuno. Dolor. Espalda. Sueño. Mucho. Ay. 09.30 a.m. Un curso que no importa. Echar de menos desde hace semanas. No saber porqué. No saber qué hacer. Saberlo inútil. Irremediable. No saber parar. 14.00 p.m. Saber queSigue leyendo «Sol de medianoche (o la crónica de un día cualquiera).»

Extraño animal mamífero.

«Era una noche como todas las demás. Vacía (…) Una vez más se encontraba en presencia del misterio. Lluvia. Risas. Historia. Arte. La hegemonía de la muerte.« Raymond Carver. Tengo sueño y nunca duermo. Nunca –me- duermo. Nunca. Soy murciélago. Mamífero murciélago. Como quien tiene miedo de dejar de amamantar al quedarse dormido. O delSigue leyendo «Extraño animal mamífero.»

Preguntas de madrugada.

«Yo decía: algunas veces eres lo que nunca tendré, algunas veces eres todo lo que he perdido». Benjamín Prado. Este sábado, después de tanto tiempo, recitamos algunos fieles ronroneadores, como la pequeña familia poética que somos, en el Café Libertad. Y a los miembros de la familia que no pueden venir, les queremos igual, ySigue leyendo «Preguntas de madrugada.»

The City that doesn’t sleep.

«Si no son pájaros cubiertos de ceniza, si no son los gemidos que golpean las ventanas de la boda, serán las delicadas criaturas del aire que manan la sangre nueva por la oscuridad inextinguible. Pero no, no son los pájaros, porque los pájaros están a punto de ser bueyes; pueden ser rocas blancas con laSigue leyendo «The City that doesn’t sleep.»

Tu boca (o capítulo 7)

Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige ySigue leyendo «Tu boca (o capítulo 7)»

La verdad.

«Bajo las águilas silenciosas, la inmensidad carece de significado». Antonio Gamoneda. Si ahora de pronto son las horas más humanas, más blandas, más musgo y más arena y por primera vez reales, ¿Dónde se fueron los ideales? ¿Dónde quedaron las conjeturas? ¿Qué fue de los pájaros en la cabeza? Tal vez esto sea ser piedra,Sigue leyendo «La verdad.»

Me basta.

«Eres. Me basta.» Pedro Salinas. Pero no siempre basta. Algunas veces quiere arrancarte los labios, poder sangrar las palabras que nunca dices, escupir todo aquello en su cuerpo que lleve tu nombre. Otras veces es para ti un pájaro cargado de futuro, la esperanza de una piel, un lugar común, un hogar. A veces leSigue leyendo «Me basta.»

Pero quizás

«La vida se metió por medio, -toda esa cagada que nos deja empantanados cuando no tenemos los cojones de luchar por lo que queremos- pero nunca perdí el interés.» Paul Auster, Brooklyn Follies. Fotografías: Alberto García-Alix. Paul Auster, las casualidades y yo. Encuentros y desencuentros. Música como remedio. Se apaga la ciudad.